Atribuir
la ineficiencia de esos organismos solo a la injerencia de los gobernadores es
un diagnóstico a medias, plantea el senador de la bancada del PRD
"Enfrentemos el problema con los gobernadores que se han
convertido en virreyes; acabemos con éstos y con la impunidad"
Por Diego
Badillo
La propuesta de
eliminar los institutos estatales electorales y crear en su lugar un instituto
nacional que se haga cargo de las elecciones locales y federales es la
respuesta a un problema mal diagnosticado y por lo tanto incorrecta, planteó el
senador Alejandro Encinas Rodríguez.
En entrevista,
el Presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Segunda -la cual, junto
con la de Puntos Constitucionales, de Gobernación y Reforma del Estado, está
encargada de revisar las iniciativas de reformas en materia política-electoral
e integrar un dictamen para someterlo al pleno- explicó que atribuir la
ineficiencia de los organismos electorales sólo a la injerencia de los
gobernadores es un diagnóstico a medias.
Explicó que
desde esa perspectiva no se toman en cuenta otros factores, como la complicidad
y la corrupción de los propios partidos políticos que han permitido que eso
ocurra.
Dijo que hay
entidades del interior de la República, como el Estado de México, donde los
partidos políticos de oposición -siendo mayoría en el Congreso local entregaron
el control del órgano electoral al jefe del Ejecutivo local.
"Tenemos un
problema de naturaleza distinta, en el que no solamente son los gobernadores
sino la corrupción y la complicidad de los partidos o sus grupos
parlamentarios, lo cual no quiere decir que se vaya a resolver creando una
fuerza central donde se pueda reproducir ese mismo tipo de prácticas",
mencionó.
En ese sentido,
dijo que pensar que atrayendo al centro del país las facultades para la
organización de las elecciones se va a terminar con el problema es equivocado.
"No se va
a resolver porque la injerencia fundamental de los gobernadores en los procesos
electorales no está en el control del órgano electoral sino en el manejo de los
recursos públicos, compra de votos y el uso desmedido de recursos para lograr
que la gente vote por los candidatos que quiere. Todo lo demás es una
simulación, afirmó.
El también
Secretario de la Comisión de Puntos Constitucionales manifestó que se inició
mal el debate sobre la pertinencia de crear un instituto nacional electoral
porque en lugar de estar pensando en fortalecer la autonomía de los organismos
garantes del ejercicio de los derechos electorales -al igual que se hizo con
quienes garantizan la transparencia y el acceso a la información, por ejemplo?
hoy estamos tratando de buscar culpables de problemas reales que existen en las
entidades, tratando de atraer de manera centralizada la solución o la falsa
solución a esas situaciones.
El legislador
de la bancada del PRD consideró que si el problema son los gobernadores,
"pues enfrentemos el problema con los gobernadores que se han convertido
en virreyes; acabemos con los virreyes y la impunidad con la que han actuado en
los estados".
Encinas
Rodríguez aclaró que se trata de una discusión profundamente política, aunque
tiene asuntos administrativos y de costos económicos.
En ese sentido
dijo: "yo quisiera ver qué Congreso del estado va a renunciar a su
facultad de legislar en materia electoral para que le digan en qué términos y
condiciones van a elegir a las autoridades del gobierno local.
Luego, el
legislador cuestionó: "¿Por qué seguir desmantelando las instituciones
locales para volver a un proyecto de centralización que no va a garantizar ni
más equidad ni más transparencia en las elecciones?".
REQUERIMIENTOS
MÍNIMOS El senador expuso que la reforma político-electoral que se apruebe en
este periodo ordinario de sesiones al menos debe contemplar aspectos
relacionados con el régimen político, como el gobierno de coalición; darle
certidumbre al Congreso de la Unión; ratificar y remover funcionarios;
contemplar la aprobación del Plan Nacional de Desarrollo y la estrategia
nacional de seguridad; además de realizar modificaciones en cuanto al uso de
recursos públicos en las campañas y los mecanismos de control, la regulación de
las campañas electoral y gubernamental.
"Yo creo
que son muchos temas pero se concentran básicamente en el cambio de régimen y
en el asunto de las atribuciones del nuevo órgano electoral".
Por otra parte,
Encinas Rodríguez se manifestó en favor de la propuesta de quitar la chequera a
los partidos políticos en época de campañas electorales.
"Veo bien
dos cuestiones: chequera única concentrada en el órgano electoral nacional para
los procesos electorales federales y los locales en su correspondiente estado;
al igual que sólo uso de recursos públicos, aportaciones de los militantes y
los servidores públicos de los partidos conforme a las disposiciones
estatutarias; eliminación de utilitarios en las campañas ?como despensas,
chivos, fertilizantes o vasos? para que solamente se queden gorras, camisas y
todo lo que sería textiles. Todo eso ayudarla a tener un control mucho más
rígido del uso de recursos en las campañas".
La idea, dijo,
es que la autoridad sea la encargada de hacer los pagos a los que se
comprometan los partidos políticos a fin de que sea más transparente el gasto
de campaña. Eso además de la propuesta de anular las candidaturas y
ocasionalmente la elección, en casos de comprobarse el rebase de tope de gastos
de campaña.
LOS FOCOS DEL
TEMA ¿Por qué no debe ser aprobada la eliminación de los institutos
estatales electorales y en su lugar crear un Instituto Nacional Electoral?
Porque lo que está planteado es una centralización absoluta. No solamente de la
organización sino también de la legislación respecto de los procesos
electorales en los estados y municipios.
A mi juicio,
eso vulnera profundamente el pacto federal y lesiona libertades y autonomía de
los estados y municipios. No veo por qué los congresos locales deban renunciar
a su facultad de legislar en materia electoral para elegir a los gobernantes de
su estados y de sus municipios; y tampoco por qué, si la pretensión es acabar
con la injerencia de los gobernadores en los procesos electorales ?lo cual es
un diagnóstico a medias ya que también la complicidad y la corrupción de los
partidos políticos lo ha permitido atraerlo? suponga que va a eliminarse la
injerencia del Ejecutivo federal en la designación de los consejeros del
instituto nacional.
Es una
iniciativa que debe de revisarse en sus costos de operación administrativa y en
las atribuciones que tienen los órganos locales.
¿Cuáles son los
puntos que forzosamente debería contener la reforma político-electoral que
actualmente se discute en el Senado? Debe contener aspectos de cambio de
régimen político, como es el establecimiento del gobierno de coalición, darle
atribuciones al Congreso de la Unión para ratificar y remover funcionarios, la
aprobación del Plan Nacional de Desarrollo y la estrategia nacional de
seguridad pública; revisar modiñcaciones en cuanto al uso de recursos públicos
en las campañas y en los mecanismos de control, la regulación de la campaña
electoral y gubernamental.
Yo creo que son
muchos los temas pero se concentran básicamente en el cambio de régimen para el
asunto de las atribuciones del nuevo órgano electoral.
Partiría de un
principio de que, al igual de que lo hicimos en el IFAI, se fortaleciera al IFE
y a los órganos electorales locales; enfrentar el problema en cuanto a la
designación de los consejeros electorales en los estados de manera distinta,
homologando las normas en los congresos locales para que en todos los casos sea
por dos terceras partes de mayoría calificada, con procesos de selección
derivados de un servicio nacional profesional electoral que podría acabar con
injerencia de los gobernadores porque, como lo están planteando ahora, lo
cierto es que no resuelve el problema.
La injerencia
fundamental de los gobernadores no está en el control del órgano electoral sino
en el manejo de los recursos públicos, la compra de votos, el uso desmedido de
recursos.
Es una gran
simulación todo lo demás.